Subway, la popular cadena de sándwiches, está bajo escrutinio por supuestamente engañar a los clientes con sus anuncios, especialmente en lo que respecta a la cantidad de carne prometida en sus sándwiches Steak & Cheese. Una demanda colectiva propuesta presentada el lunes en Brooklyn acusa a la cadena de hacer afirmaciones engañosas que llevan a los consumidores a creer que están recibiendo significativamente más carne de la que realmente se sirve.
La demandante principal, Anna Tollison, afirma que pagó $7.61 por un sándwich Steak & Cheese de Subway, solo para decepcionarse con la escasa porción de carne que recibió. Según Tollison, la publicidad de Subway sugiere que los clientes están recibiendo al menos un 200% más de carne de la que realmente obtienen. La demanda incluye evidencia fotográfica, que muestra que los sándwiches consisten principalmente en pan, con la carne apareciendo escasa en comparación con lo que se muestra en los materiales promocionales.
Las acusaciones presentadas en la demanda afirman que Subway ha violado las leyes de protección al consumidor de Nueva York, que están diseñadas para asegurar que la publicidad sea veraz y no engañosa. La demanda busca daños no especificados para los neoyorquinos que han comprado los sándwiches Steak & Cheese de Subway en los últimos tres años.
El abogado de Tollison, Anthony Russo, expresó sus preocupaciones en una entrevista con Reuters, afirmando que este caso ejemplifica un problema significativo en la publicidad de alimentos. “Esto representa un ejemplo egregio del tipo de publicidad que estamos tratando de detener”, señaló, destacando las implicaciones más amplias de las prácticas de marketing engañosas en la industria de comida rápida.
Este no es el primer desafío legal que Subway enfrenta por sus prácticas publicitarias. La cadena anteriormente lidió con una demanda que afirmaba que sus sándwiches "footlong" eran, de hecho, más cortos de lo publicitado, la cual fue desestimada en 2017.
Curiosamente, el equipo legal de Tollison no está solo en la búsqueda de tales reclamos contra los gigantes de comida rápida. El mismo bufete de abogados ha presentado demandas similares contra otras grandes cadenas, incluidas McDonald’s, Wendy’s y Taco Bell, todas las cuales fueron desestimadas el año pasado en el mismo tribunal.
A medida que el caso avanza, plantea preguntas importantes sobre la transparencia y la equidad en la publicidad dentro del sector de comida rápida, destacando la posibilidad de que los clientes se sientan engañados por sus compras. El resultado de esta demanda podría sentar un precedente sobre cómo las cadenas de alimentos representan sus productos en los anuncios y las ramificaciones legales del marketing engañoso.